➡ Michel Olguín Lacunza /Instituto Nacional de Salud Pública de México
Ante la emergencia de la pandemia de la COVID-19 los técnicos reaccionaron muy bien, no así el sector administrativo, fue la peor parte. De hecho, la Secretaría de Salud fue la única dependencia del Estado que reaccionó bien, afirmó Samuel Ponce de León Rosales, coordinador del Programa Universitario de Investigación en Salud de la UNAM.
En el evento, “Retos y Perspectivas del combate al COVID-19 en México”, organizado por Instituto Nacional de Salud Pública de México participaron varios especialistas sobre el tema. Entre ellos, Alejandro Macías Hernández, integrante de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus, quien dijo que la actual pandemia de la COVID-19 es la peor crisis de salud que el mundo ha vivido en 100 años.
Agregó que esta situación es una responsabilidad muy grande para el sector salud, que se encuentra en el frente de batalla y no pueden claudicar. Mencionó que falta mucho por hacer y existe una necesidad de las pruebas serológicas y hay una gran falla en la adquisición de equipamiento.
Por su parte, Ponce de León, coordinador de La Comisión de la UNAM, indicó que el confinamiento es muy complicado. De hecho, existen muchos mexicanos que salen a las calles porque viven al día. “Si les preguntas qué hacen afuera te contestan que no les importa el virus, sino obtener ingresos para comer hoy”.
En tanto, Celia Alpuche Aranda, directora del Centro de Investigaciones sobre Enfermedades Infecciosas, del Instituto Nacional de Salud Pública, precisó que en su sistema se han hecho 160 mil pruebas en dos meses, más de las que se hicieron cuando fue la pandemia del H1N1 en todo un año. El total de pruebas, entre todas las instituciones públicas y privadas, es de casi 250 mil.
Jean-Marc Gabastou, asesor internacional de Emergencias en salud de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de Salud, enfatizó en la importancia de informar a la población sobre este tema. “Hoy más que nunca tenemos que comunicar, comunicar y comunicar”.
Macías Hernández manifestó que siempre hay que dar las malas noticias, para que la información sea creíble, pero también es importante que después se anuncie un mensaje optimista. “Tenemos que usar las redes sociales o nos ganarán esos espacios de información”. Es muy importante, añadió, tener la capacidad de que nos crean, y reconocer los errores para siempre sonar creíbles. “Esto es algo fundamental en una situación de riesgo”.
Finalmente, José Rogelio Pérez Padilla, investigador en Ciencias Médicas en la Clínica de Trastorno Respiratorio del Dormir, del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, declaró que la vuelta a la normalidad será muy paulatina y con la posibilidad de echar marcha atrás.